AMBROSY JIMÉNEZ, MARÍA DOLORES
En nuestra vida la nota dominante de nuestra canción ha de ser siempre el Amor.
El Amor que debe empapar nuestro corazón y nuestra alma en cada instante, en cada pensamiento, en cada sentimiento, en cada acción. Y el fruto del Amor entre muchos otros es la paz.
En medio de la paz reinante en nuestro ser hay momentos de añoranza en los que recordamos con nostalgia instantes fugaces del pasado que marcaron nuestra vida y que no podemos olvidar porque forman parte de nuestro bagaje.
Mas la añoranza no debe ser el timón que nos conduzca a la Meta. Ésta sólo la alcanzaremos viviendo en el Amor y para el Amor.
En este libro la autora trata de plasmar sus momentos de añoranzas en medio de la paz de su ser que está dirigido y gobernado por el Amor, el Amor a Dios, que conforma toda su vida y al que quiere seguir entregando todo lo que es, lo que ha sido y será, hasta fundirse del todo en Él.