Nuestro protagonista es un huevo muy bueno: te riega las plantas, te cambia los neumáticos ¡y hasta te pinta la casa! Si necesitas ayuda para lo que sea, él es tu huevo. Pero, a veces, ser demasiado bueno no da el mejor resultado
This website uses cookies, both its own and those of third parties, to improve your browsing experience. If you go on surfing, we will consider you accepting its use here or change the configuration.