MARTÍNEZ GARCÍA, DIEGO
Tierra de carne, mujer, / que abrasas la carne miía / al surcar con mi arado / lo profundo de tu ser.
Lector aquí encontrarás poesiía auténtica, el debate de un hombre consigo mismo, sobre las realidades que le han embargado desde la niñez, a lo largo de su vida. Un hombre partido en dos como una caña, que canta a la mujer y al amor, que se enfrenta al Olimpo y a Dios (o a la ignorancia de todos sobre Dios). Una poesía profunda, a veces difícil, pero siempre sincera.
También poesía social como respuesta a un tiempo que le tocó vivir, como vemos en «Oscuros tiempos», dedicada a las dificultades de la Postguerra y cómo aquella generación [la de nuestros abuelos] cumplió con su compromiso histórico.
Y sobre todo, una poesía que refleja un inmenso amor por la tierra que le vio nacer: Andalucía, la Axarquía almeriense, el río Almanzora, y de alguna manera todo lo que se considera genuinamente huercalense, como la Virgen del Río, el Cura (Salvador Valera), el Castillo, etc.